Existen dos grandes variedades de café (Arábica y Robusta), dentro de las cuales hay, a su vez, multitud de subvariedades.
El café Arábica es originario de Etiopía y representa aproximadamente el 75% de la producción mundial de café.
Tiene un sabor más delicado y un aroma más refinado que la variedad Robusta, aunque las plantas de café Arábica son más delicadas y difíciles de cultivar.
El café Arábica se cultiva principalmente en las siguientes regiones del mundo:
Por su parte, el café Robusta representa aproximadamente el otro 25% de la producción mundial.
Requiere condiciones menos exigentes de cultivo que el café Arábica, tiene mayor contenido de cafeína, un sabor más fuerte, mayor acidez y da como resultado una bebida más densa (con más cuerpo). Es un café menos aromático que el Arábica y se utiliza para fabricar casi todos los cafés instantáneos y molidos para cafeteras con filtro.
El café Robusta se cultiva principalmente en las siguientes regiones del mundo: